En la última sesión del Concejo Municipal, donde se habló de seguridad, el Concejal Hugo Ramiro Arbeláez, al dirigirse a la Secretaria de Gobierno la Dra. Olga Ligia Jiménez, lo hizo en forma por demás irrespetuosa, pues duelale a quien le duela, la Dra. Jiménez es una dama, que al ocupar dicho cargo, tuvo todas las expectativas y deseos de realizar una buena gestión.
La frase de cajón: “ Si le quedó grande el cargo, renuncie”, fuera de ser irrespetuosa es una frase grosera y mal interpretada, pues todo funcionario lo que trata de hacer, estamos seguros, que es con la mejor voluntad.
Le sugerimos al Concejal Arbeláez, que no olvide el refrán: “El que tiene rabo de paja, no se arrime a la candela”, y cuando el se equivocó, pues es una cualidad humana el equivocarnos, nadie le pidió la renuncia.
La seguridad en el municipio no es de 20 policías, es de toda una comunidad unida y si en un estadio con 200 agentes de policía, y 30.000 espectadores, se producen inconvenientes, que diremos de 50.000 habitantes en un espacio de más de 400 Kms² . Esperamos que el Concejo sea un recinto de la democracia, no un ring de boxeo.
NO HAY DERECHO
