AÑO NUEVO, PROPOSITOS RENOVADOS
Estos principios de año son momentos propicios para reflexionar sobre los tiempos pasados y pensar en el tiempo que se viene y hacer propósitos hacia el futuro. En estos momentos debemos concentrarnos y hacernos una autocritica y objetivamente analizar que hicimos bien?, en que momentos actuamos mal?, porque algunas cosas que nos propusimos no las concluimos y las dejamos empezadas?, fuimos justos con el trato a los demás y nosotros mismos?, manifestamos cosas sin fundamento y exageramos cuando juzgamos?, callamos cuando lo aconsejable era hablar?, las metas que nos habíamos trazado en años anteriores las logramos?, como puedo mejorar mis relaciones afectivas con mi familia, mis amigos y mi entorno?; me caso o sigo disfrutando de mi soltería?; dedico tiempo al deporte o sigo abusando de mi cuerpo y de mi salud?; le dedique el tiempo suficiente a las personas que quiero?; como voy a organizar mis finanzas?; cuales son los propósitos para los próximos doce meses?; cuales son las prioridades que debo tener en mi futuro?. Estas preguntas y algunas otras son las que debemos dilucidar y nos encontramos en el momento preciso para reflexionar sobre ellas.
Y es que es realmente necesario hacer un balance de lo que hemos hecho y de lo que se viene en nuestras vidas, tratar de aprender de los errores y tener voluntad de no volver a caer en ellos, renovarnos espiritual y físicamente, no hacer propósitos y luego caer en la desidia y la pereza, trazarnos objetivos claros y alcanzables, proponernos a ser fuertes ante los momentos de infortunio que puedan llegar y a ser humildes antes las metas alcanzadas, a ser tolerantes y respetuosos con las personas de nuestro entorno, a ser prudentes en cuanto a lo que manifestamos sobre todo cuando hablamos de los demás. Estos propósitos nos renuevan y hacen que miremos nuestro futuro con un optimismo reforzado.
Toda persona,sin excepción, quiere sentir que aporta algo a la sociedad, que es útil y que para poder lograrlo es proponiéndose a mejorar, proponiéndose a armar un futuro y así si yo logro prosperidad y bienestar para mi mismo y para mi familia, eso se vera reflejado en la sociedad en la que me desenvuelvo, en mi lugar de trabajo con mis compañeros y en cualquier entorno en que este presente. Porque cada uno de nosotros es responsable de si mismo, y uno mismo decide si quiere que le vaya bien o mal en adelante, y que mejor forma de hacerlo conociendo sus propias cualidades y errores y a través de eso con tu propio balance sacar provecho para tu propia vida. No importa cuantas veces caigamos, si eso nos sirve para levantarnos con más fuerza y retomar el camino con más fortaleza.
Tengamos prioridades y con determinación y arrojo ejecutarlas, nada haríamos si nos hiciéramos propósitos y los dejáramos en mitad del camino por indisciplina o por falta de voluntad, hay que poner todo el esfuerzo posible para culminar lo propuesto e ir superando escalones y cada día superarnos más, no podemos dejar de soñar y porque no?, hacer realidad esos sueños, no bajar la intensidad, dejar atrás los errores del pasado, y no perder la imaginación, la curiosidad y sobre todo la energía.
No nos quedemos lamentando por lo que ya paso, hay que mirar para adelante, hay que seguir luchando, levantándonos con ese propósito de alcanzar las metas y ese debe ser el sentido de nuestras vidas. La mayoría de los seres humanos somos bondadosos y nobles y así siendo mayoría derrotaremos la maldad y haremos de nuestra sociedad cada vez mejor.
Siempre habrán propósitos nuevos, siempre habrán nuevas puertas que se abren, siempre llegaran personas nuevas a nuestras vidas, siempre habrán nuevos retos por superar, siempre habrán nuevos objetivos por cumplir, siempre habrán nuevas metas porque luchar; y eso es lo bueno de nuestras vidas, eso es lo que hace de nuestro existir un paso agradable por el mundo.
Que este nuevo año para los carmelitanos sea de prosperidad, de muchos logros y de convivencia en paz.
JOAQUIN DARIO DUQUE ZULUAGA
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